26 de agosto de 2015

Una topera con cuarzos en Ezcaray

La semana pasada estuvimos disfrutando con las niñas de la naturaleza y La Rioja en Ezcaray. Entre excursión y excursión el 19 de agosto hice una escapada improvisada a La Sierra y casi sin buscarlo tuve un golpe de suerte. En una hora  me encontré con esta topera y un montón de piezas grandes y pequeñas de cuarzo con siderita transformada en limonita.

El hueco acabó teniendo unas dimensiones de 1 x 0.5 x 1 metros
Por falta de tiempo dejé algunas piezas dentro así que dos días después ya estaba junto a mi topera a las 7 de la mañana para terminar el trabajo. Lo mejor estaba por llegar ya que dentro aparecieron más geodas con piezas flotantes y buenos cuarzos, aunque en general no muy desarrollados (2-3 cm) y cubiertos de calcita y/o dolomita.

Llegó un momento en que tuve que parar porque bajar tal cantidad de piedras con toda la herramienta encima desde tan arriba no es tarea fácil ni recomendable para las rodillas. Por otro lado, la siderita alterada se rompe con facilidad con lo que hay que guardar las piezas con cuidado (mea culpa, sólo llevaba periódicos y bolsas de plástico). Así que dejé algo para futuras visitas lo que mantiene vivos la emoción y el gusanillo del yacimiento.

En esta zona siempre me pasa lo mismo: Cuando no voy con intención de trabajar o con muy poco tiempo es cuando doy con algo que merece la pena. Sea como fuere, he vuelto a recuperar la ilusión por el yacimiento que tenía pensado empezar a mostrar a algunos amigos cercanos y que, obviamente, tendrán que esperar ;-)

Ahora toca limpiar con calma todas las piezas y decidir cómo administrarlas.

Estos son los resultados de las pruebas que he hecho en tres piezas pequeñas.

Esa mierdilla del medio es una calcopirita alterada
Pieza flotante: Cuarzo, cuarzo, y cuarzo con siderita alterada

Ya tengo trabajo para todo el otoño :-)

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